Pensemos el futuro del país

Pensemos el futuro del país

Por Estela María Dos Santos

Por $80 por día, un operario de una multinacional automotriz, puede comer así, dignamente. Así como millones de argentinos, no. Nos quieren hacer creer, que por culpa de derechos como estos, adquiridos por los sindicatos, las inversiones no llegan y que la flexibilización laboral, sí lo permitirá.

Todos sabemos que es mentira. Que el mundo se ha vuelto hostil al intercambio, que el proteccionismo es una estrategia política para que los países emergentes, sintamos el rigor de los patroncitos y nos dobleguemos ante los amos del mundo.
Cuando dicen que vamos a ser Venezuela, no es porque Cristina sea Maduro, es porque EEUU está dispuesto a seguir presionando para que América del Sur, vuelva a ser colonia.

CFK era soberbia, por eso las inversiones no llegaban. MM se arrastró por todos los mercados internacionales, les brindó nuevamente la bicicleta financiera, liberó la importación, lo sacrificó todo... derechos, independencia y soberanía económica. Y qué vendió, aparte de unos limones o unos kg de carne?

NADA. Ya sabemos que con estimular el mercado interno, no alcanza. Pero sin el mercado interno, todo se viene a pique. No importa a qué clase social o política pertenezcas, o pertenecías. La propuesta de CFK, sobre el nuevo contrato social, es la única salida.

Es falaz el enunciado: "Para estar bien tenemos que estar mal".
¿Somos una potencia mundial en recursos?
¿Cuántas provincias conforman la Pampa Húmeda?
¿Qué costos ecológicos y de salud pública, estamos pagando con el desmonte y los agroquímicos?
¿Qué queremos como sociedad?
¿Cuál es el modelo de país que nos sirve y nos hace falta?
Tenemos que superar la diatriba peronista o antiperonista, o K o anti K, que nos imponen los grupos mediáticos, contratados por los dueños del capital internacional. Porque nuestra problemática, trasciende la causa local.
Es el mundo, despleguemos nuestros sentidos al máximo, ver leyendo, oír escuchando, hablar concientizando. Lejos del fanatismo, inmersos en la realidad.
Estoy de este lado, te vengo ofreciendo mi opinión, mi criterio, mi saber, porque me importás vos, y vos, y vos, independientemente de tus gustos políticos, porque me importa el futuro que le dejamos a nuestros hijos, nietos.

 Así como hubo líderes históricos que pensaron un país libre, soberano y con derechos sociales que nos dieron acceso a esta vida, o a este almuerzo de privilegio, pensemos más allá de hoy, para siempre.